El oráculo chino de las mutaciones apareció en China en torno al 2852 a.C. En aquel entonces, el emperador Fu-Shi eligió esta técnica de adivinación simbólica y la organizó en lo que se conoce como el primer orden del oráculo. Finalmente, lo que era un sistema de adivinación transmitido oralmente se convirtió en un libro (i Ching) que invitaba a descubrir a la gran persona que cada uno llevaba en su interior.
Militares, reyes, magos y filósofos han utilizado las mutaciones del oráculo chino durante siglos, llegándose a convertir en un libro de referencia.
Oráculo chino de las mutaciones
¿Cómo consultar el oráculo chino de las mutaciones?
Antes que nada, has de saber que las respuestas que obtengas de i Ching hay que tomarlas muy en serio. No es un juego, ya que se cree que el espíritu en el que está sustentado el libro podría molestarse, de otro modo. También has de tener en cuenta que aunque las palabras que te arrojen suenen raras o creas que no tienen relación con tu pregunta, realmente sí lo tienen, por lo que habrá que reflexionar sobre ellas antes de juzgarlas.
Con respecto a la formulación de las preguntas, también debes seguir unas reglas. El I Ching (u oráculo chino de las mutaciones) se basa en el principio de las mutaciones. Es decir, que una pregunta como «¿Juan me ama?» puede que no tenga una respuesta satisfactoria. En su lugar, sería más apropiado preguntar: «¿cómo me irá la vida si la comparto con Juan?».
Si queremos consultar al oráculo chino de las mutaciones para solucionar algún problema profesional o tomar una decisión, sería un error preguntar: «¿debo hacer esto o lo otro?». Sería mucho mejor dividir la pregunta en dos: «si hago esto, ¿está bien?» y, a continuación: «si hago lo otro, ¿está bien?». Por último, compara ambas respuestas y llega a tus propias conclusiones.
Por otro lado, es aconsejable consultar el oráculo chino de las mutaciones cuando necesitamos tomar una decisión rápida pero importante, o cuando nos topemos con baches temporales en nuestras vidas. La pregunta que hagas no puede repetirse más de una vez por sesión. Si crees que la respuesta no te ha resuelto las dudas, espera al menos un día y una noche antes de repetir.
Método de consulta del oráculo chino de las mutaciones
- Para consultar el oráculo consigue tres monedas iguales.
- Asigna a la cara de esas monedas un valor nominal de dos y a la cruz, uno de tres. Si no queda claro cuál es la cara y cuál es la cruz, ponles el número de acuerdo con lo que te diga el instinto.
- Concéntrate mucho en la pregunta que vas a hacer. Si es necesario, escríbela en un papel y siempre ten en cuenta las referencias anteriores que se hicieron a esa cuestión (no olvides que tienes que llegar a tus propias conclusiones).
- Cuando creas que has llegado al punto óptimo de concentración, tira las monedas al aire, de manera que caigan frente a ti, y suma el resultado. Ten en cuenta que la suma va a ser siempre seis, siete, ocho o nueve. Escríbelo en una hoja de papel, indicando que corresponde al primer lanzamiento.
A continuación, tienes que hacer lo mismo seis veces, anotando siempre los resultados y el lanzamiento al que corresponde. Cuando termines, puedes enviarle la respuesta a un experto en el oráculo para que las interprete. Está la posibilidad de hacer la consulta de forma online; el método es exactamente el mismo descrito aquí, con la diferencia de que los resultados se envían por Internet en la misma plataforma y la interpretación es bastante más rápida.
En cualquier caso, el oráculo chino de las mutaciones puede responder con uno o dos hexagramas. Si es solo uno, la respuesta será más contundente y sin género de dudas. Si son dos, las cosas no estarán tan claras y el problema que hayas plantado puede ser resuelto desde múltiples perspectivas, siendo decisión tuya el camino a escoger. En este caso, también te señalan cómo va a evolucionar ese asunto en un futuro e incluso pueden añadirte algunos consejos o recomendaciones.
Quizás, en este punto, te estarás preguntando qué son esos hexagramas del oráculo chino de las mutaciones. Se refieren a un conjunto de números que se obtienen tras la combinación de 8 triagramas básicos. Estos últimos están compuestos por tres columnas y son cruciales para hacer una buena interpretación de los oráculos. Estas numeraciones han ido cambiando con el tiempo, pues sobre todo con respecto a su disposición, los triagramas normalmente estaban escritos en forma de círculo y se solían imprimir en los espejos.
En conclusión, el oráculo chino de las mutaciones es un complejo método de adivinación que se basa en un juego de preguntas y respuestas que han de hacerse siguiendo unas reglas. Se trata de una ciencia milenaria que ahora también se puede hacer a través de Internet.